Mateo 5:48

 "Por tanto, sed vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto."

 

Este pasaje se encuentra en el Sermón del Monte, donde Jesús establece los principios del reino de Dios. La perfección a la que se refiere no es una perfección absoluta, sino un llamado a vivir de acuerdo con el ideal de amor y rectitud que caracteriza a Dios. Aquí, la perfección implica un compromiso constante con la justicia, la compasión y la integridad en nuestras acciones y pensamientos.

Lo que Dios espera de nosotros

  • Amor y perdón: Dios desea que tratemos a los demás con amor y perdón, reflejando su carácter. Se espera que podamos superar la tentación de juzgar y criticar a los demás y, en cambio, ofrecerles gracia.
  • Compromiso con la justicia: Siguiendo el ejemplo de Dios, se nos llama a vivir de manera justa y a actuar en defensa de los que son oprimidos o tratados injustamente.
  • Búsqueda de la santidad: La perfección en este contexto implica un esfuerzo continuo por acercarnos más a Dios y a su voluntad, desarrollando virtudes que representen su carácter.

Oremos:

Amado Dios, en este momento me acerco a Ti con un corazón abierto, reconociendo Tu perfección infinita y tu amor profundo por cada uno de nosotros. Como se nos instruye en Mateo 5:48, quiero ser perfecto como Tú lo eres. Te pido que me guíes en mi camino hacia la santidad, que me ayudes a amar a los demás de manera incondicional y a perdonar incluso cuando sea difícil. Que mis acciones reflejen Tu justicia y misericordia, y que a través de mí, otros puedan ver Tu luz en un mundo que a menudo parece oscuro. Ayúdame a seguir creciendo en la fe y en la obediencia a Tu Palabra. Amén.


 

 


Sed, pues, vosotros perfectos, así como vuestro Padre.

Escrito el 12/10/2024
Somos AMMI