Devocional: La Fe de la Sunamita
La historia de la sunamita, narrada en 2 Reyes 4:8-37, nos muestra a una mujer de gran fe y hospitalidad. Ella reconoció el valor del profeta Eliseo y no dudó en ofrecerle un lugar en su hogar. Su generosidad fue recompensada con la promesa de tener un hijo, aún en su edad avanzada.
Cuando su hijo falleció, la sunamita no se desanimó. En lugar de sucumbir ante la tragedia, se dirigió al profeta Eliseo con gran determinación. Su respuesta fue de fe inquebrantable, declarando que todo estaba bien, a pesar de su dolor. Esta actitud nos enseña a confiar en Dios incluso en los momentos más oscuros de nuestra vida.
Finalmente, Eliseo resucitó a su hijo, demostrando que Dios es un Dios de milagros. La historia de la sunamita nos inspira a mantener nuestra fe y a buscar a Dios, sin importar las circunstancias que enfrentemos.
Oración
Señor, te agradezco por la fe que me inspiras a diario. Ayúdame a ser como la sunamita, confiando en Ti en cada situación. Fortalece mi corazón en tiempos de dificultad y guíame para que mis acciones reflejen tu amor y bondad. Amén.